Cuenco tibetano para relajación

Un cuenco tibetano hecho a mano es sin duda un accesorio valioso que vale la pena tener y conservar por la calidad del sonido que genera....
En la medicina holística, son muchas las herramientas que se utilizan para lograr el bienestar. Una de ellas es el sonido, ya que se considera que según el tipo de vibración que emita, puede causar alivio a ciertas dolencias o inducir estados de relajación y paz mental. De allí el auge de la musicoterapia, por ejemplo, pero también del uso de artefactos como los cuencos tibetanos, destinados específicamente a la recreación de sonidos que se consideran relajantes y sanadores.
Un cuenco tibetano hecho a mano es sin duda un accesorio valioso que vale la pena tener y conservar por la calidad del sonido que genera....
Los cuencos tibetanos se utilizan en múltiples prácticas destinadas a alcanzar el bienestar, debido a los beneficios que genera su sonido característico....
Un verdadero cuenco cantor está moldeado con golpes de martillo, tal y como dicta la tradición tibetana. Tener uno con estas características garantiza un son...
Si te inicias en el mundo de la meditación o eres un aprendiz en el uso del cuenco tibetano, este tazón de inspiración tradicional es lo que necesitas....
Un cuenco tibetano elaborado de forma artesanal es sin duda un valioso regalo que perdurará en el tiempo....
Los cuencos tibetanos originales tienen una aleación de siete materiales que garantizan la calidad de sonido....
Si buscas un cuenco de inspiración étnica, este puede ser una excelente opción...
Los cuencos tibetanos son apreciados en el mundo del budismo y la medicina alternativa por la calidad del sonido que produce, que puede llegar a ser muy relajan...
Los cuencos tibetanos se usan en algunas terapias alternativas, pero también se emplean de forma doméstica para hacer limpiezas energéticas a través del sonido, o como un complemento en una sesión de meditación o relajación.
Si bien se desconoce la fecha exacta en la que comenzaron a fabricarse los cuencos tibetanos, sí se sabe que fue en el Tíbet donde los monjes comenzaron a utilizarlos en sus rituales, empleando técnicas magistrales para extraer sonidos particularmente agudos que pueden mantenerse durante un tiempo prolongado, especialmente en espacios cerrados. Dichos sonidos pueden variar según cómo se utilice la baqueta con la que deben tocarse, así como de la composición del cuenco. Los cuencos tibetanos tradicionales están hechos con una aleación de siete metales, que representan el Sol (oro), la Luna (plata), Mercurio (mercurio), Marte (hierro), Saturno (plomo), Júpiter (estaño) y Venus (cobre). Pueden pesar desde unos 150 gramos hasta varios kilos, y los más grandes pueden llegar a medir unos 40 centímetros.
Los cuencos tibetanos o cantores, como también se les conoce, deben ser frotados en sus bordes y lados con una baqueta o bazo. El roce genera una vibración con un sonido característico que se utiliza para efectos de meditación, relajación o terapias de sanación, ya que quienes practican la medicina alternativa consideran que la vibración emitida por el cuenco es capaz de equilibrar el campo energético, generando bienestar en la persona que lo recibe.
Antes de utilizarlo, lo ideal es escoger un lugar tranquilo en donde pueda tocarse el cuenco tibetano sin interrupciones. De ser posible, debería ser un lugar fijo. Luego, sentado en flor de loto y con el cuenco a la altura del pecho pero separado del cuerpo, se procede a pasar el brazo de formar circular hasta que salga el sonido. Muchas personas pueden tener dificultad para tocar el cuenco tibetano la primera vez. En esos casos, se recomienda tocar ligeramente el centro del cuenco y luego volver a frotar los bordes para que finalmente emita un sonido.
La utilización del sonido de los cuencos tibetanos está basada en el principio de resonancia, que dice que una vibración intensa y armónica termina por modificar a otra de menor alcance, por lo que se cree que dichos sonidos pueden modificar las vibraciones bajas que generan estrés, malestar físico o emocional a quien lo padece.
Es importante que esté elaborado con materiales de buena calidad, y si está hecho a mano, mucho mejor. Si es tu primer cuenco, es mejor comprarlo de tamaño pequeño o mediano para que sea más fácil de manejar. También sería recomendable haber aprendido a tocarlo antes. Puedes aprender con un cuenco tibetano prestado o en su defecto, participar en algún curso breve en donde puedas aprender a aprovechar todo su potencial.
En caso de que te estés iniciando, puedes comenzar con un cuenco tibetano barato mientras aprendes a tocarlo. Las marcas Flyyfree, Zap Impex y ShalinIndia tienen algunos modelos. Por otra parte, si lo que buscas es un cuenco antiguo, hecho a mano, puedes comprar uno de Bermoni con aleaciones metálicas.