Yoga Nidra para niños

En los niños, practicar esta disciplina puede ser de gran ayuda para un descanso profundo después de un día muy agitado.

También se recomienda el yoga Nidra a niños especiales, con problemas de aprendizaje, con déficit de atención o con algún trastorno de hiperactividad. En estos casos el Nidra funciona como una disciplina terapéutica para que el niño aprenda a autocontrolar sus mecanismos sensoriales y su cuerpo, al tiempo que aprende técnicas para calmar la mente y cultivar la concentración, manteniendo la atención en un solo aspecto: la respiración.

Sin embargo, aunque el yoga Nidra para niños puede ser muy beneficioso, resulta un poco difícil que los pequeños entiendan la importancia de permanecer al menos 30 minutos en una misma posición. También puede ser un impedimento que el niño no comprenda el objetivo de practicar esta disciplina y, a pesar de permanecer tranquilo, su mente no se enfoque en la práctica, sino en cualquier estimulo externo.

¿Cómo preparar a un niño para practicar yoga Nidra?

Una buena herramienta para iniciar a los más pequeños en la práctica del yoga Nidra es comprar un CD que dicte paso a paso la rutina y, muy importante, que no sea muy extenso para que el niño no se aburra o se quede dormido. Una excelente estrategia es decirle al pequeño que se trata de un juego que podrá disfrutar con papá y mamá.

Antes de comenzar la sesión es necesario crear una atmósfera tranquila, apagando cualquier dispositivo que emita sonidos, bajando la intensidad de la luz, o iluminando la habitación únicamente con velas. También se puede encender un incienso, solo si el niño lo disfruta y no es alérgico. Luego se debe acostar al niño boca arriba sobre un mat, con las palmas de las manos hacia arriba, los pies ligeramente separados y los ojos cerrados. En este momento se debe iniciar el CD y comenzar a practicar cada una de las instrucciones hasta culminar la sesión.