Yoga en casa para adelgazar
Por ejemplo, algunas posturas de yoga ofrecen trabajar los músculos del abdomen, aceleran el metabolismo, mejoran el funcionamiento de la glándula tiroides y corrigen la…
Por ejemplo, algunas posturas de yoga ofrecen trabajar los músculos del abdomen, aceleran el metabolismo, mejoran el funcionamiento de la glándula tiroides y corrigen la inadecuada postura corporal que hace que las personas se vean más rellenitas.
Sin embargo, si estás buscando un ejercicio que te ponga a sudar y a quemar calorías por montón, hacer yoga en casa para adelgazar no es la mejor opción. En estos casos, si lo que te gusta hacer es yoga, te recomendamos apuntarte a unas clases de Hot yoga o Power yoga, que son mucho más dinámicas que las sesiones de yoga tradicional y te pondrán a sudar en un salón a 42°C de temperatura.
Adelgazar haciendo yoga en casa
Aunque el yoga no sea una disciplina que te permita quemar 1000 calorías por sesión, sí cuenta con una serie de posturas que te ayudarán a moldear y tonificar tu figura, lucir menos grasa abdominal y muy importante: estar saludable por dentro y por fuera. Por lo tanto, te recomendamos utilizar el yoga durante la pérdida de peso como una disciplina complementaria que te ayudará también a disminuir la ansiedad por comer y a controlar el estrés, que es el principal motor de la producción de cortisol.
Ejercicios de yoga en casa para adelgazar
Postura para trabajar abdominales y espalda: siéntate en el mat con la espalda recta y las rodillas flexionadas. Tus manos deben estar en tus muslos y tus pies deben estar totalmente apoyados en el suelo. Levanta tus piernas 45°, estira tus brazos e intenta sujetar la punta de los dedos de tus pies con tus manos. Mantén la espalda recta, contrae el abdomen y sostén la postura durante 30 segundo. Regresa a la posición inicial y repite una vez más.
Ejercicio para glúteos y muslos: párate sobre el mat con los pies juntos y la espalda recta. Estira tus brazos hacia los lados al tiempo que inhalas, luego, exhala elevando los brazos hacia arriba y uniendo ambas palmas de las manos. Inhala y al exhalar baja tus caderas como si fueses a sentarte en un banco. Mira hacia al frente, sostén la postura durante 30 segundo con el abdomen contraído, la espalda recta y apretando los cuádriceps.